domingo, 26 de mayo de 2013

LA MILÁ..... ¿BRAGA O TANGA?

Si hay una presentadora polifacética en este país es Mercedes Milá. Ella es TV en estado puro, controla el medio como nadie, se come la cámara con su mirada, hace los guiones suyos encandilando a seguidores y levantando ampollas entre sus detractores, se salta las pautas de la dirección con un gusto que nadie puede quejarse, ella es única, sabe lo que el espectador quiere y sabe que para tener credibilidad ella debe ser la primera que debe creer, amar e involucrarse con el programa que está haciendo, por ello Mercedes vive con auténtica pasión desde una entrevista con un escritor o un ministro hasta el reportaje sobre acosadores infantiles pasando por la vida de los jóvenes que cada año deciden vivir unos meses muy especiales en la casa de Guadalix.

Cuando conocí a "la Milá" hace unos años en la redacción de Zeppelin reconozco que me impuso como poca gente lo hace. Mercedes es tal y como se la ve en televisión, es un auténtico torbellino que arrasa allá donde va, no le gusta pasar desapercibida, desde el primer momento vi que le gusta llevar las riendas de la televisión y es de las que te dice lo que le viene a la cabeza, no es de las que intenta quedar bien. Pensé "es igual que en la tele" y no me equivoqué, el tiempo que trabajé con ella me di cuenta de que la frase tan repetida de "la Milá es Gran Hermano" "Gran Hermano no sería lo mismo sin la Milá" tenía mucho de verdadero, dudo que haya un presentador que se involucre con un formato como lo hace ella, controla todo lo que ocurre en la casa, lee las bases de datos, se engancha al 24 horas, ama "Gran Hermano" más que los propios concursantes.

Ahora, más de trece años después de su estreno, Mercedes sigue al frente del reality más longevo y con más éxito de nuestro país. GH sigue consiguiendo tantos años después audiencias millonarias y su equipo, con el que he tenido la suerte de trabajar, consigue reinventarse año a año, semana a semana, logrando sorprendernos con nuevas pruebas, vueltas de tuerca a las nominaciones y giros de guión asombrosos. Cada año la gente pone en duda que GH vaya a lograr triunfar, y cada edición logra los primeros puestos de audiencia. Si la gente supiera el trabajo que hay detrás del programa y el magnífico equipo que se deja la piel cada año, quizás no criticaría tanto y de manera tan absurda el programa, ellos son los artífices del éxito del formato, pero otra pieza fundamental del triunfo es sin duda Mercedes Milá. Sus entrevistas son incisivas y cada edición se "pringa" más , al principio intentaba mantenerse totalmente imparcial, pero poco a poco vive el programa con la misma pasión que los espectadores o los cientos de bloggeros enganchados al fenómeno GH. Es la mayor defensora de los concursantes, "sus niños", de los participantes que viven el programa de manera plena, sin intentar ser como fuera quiere que sean, le gusta la gente que vive realmente las experiencias de esa casa sin preocuparse por hacer sólo lo políticamente correcto, incluso ya ama las estrategias de los concursantes.

En las últimas ediciones el plató de GH ha adquirido mayor protagonismo. Hasta hace unos años, las galas giraban en torno a lo que ocurría en la casa, pero últimamente el plató va teniendo cada vez más presencia: las entrevistas, los debates, las conexiones, la Milá cada vez tiene más elementos en sus manos y todos los maneja con la misma elegancia y sin perder la capacidad de sorprender.

Este año ha sorprendido a defensores y detractores con sus "streaptease". Nos ha dejado ver su más íntima ropa y ha saltado a los titulares por dejar ver su sujetador o sus braguitas. Una vez más ha logrado dejarnos con la boca abierta y levantar críticas por todos los lados: "Se le va la cabeza", "Hace todo por la audiencia", "Ha perdido el norte", pues no señores, la Mila evoluciona igual que evoluciona el formato e igual que evolucionamos todos. La Milá lleva años demostrando su profesionalidad y poco tiene ya que demostrar como periodista y presentadora. Esta por encima del bien y del mal y no hace daño a nadie. Hace lo que le viene en gana porque maneja el show como nadie, lo hará por la audiencia, lo hará porque le viene en gana pero desde luego no hace daño a nadie. La Milá maneja hasta la hora a la que hace estas demostraciones de sus encantos para que no queden pequeños frente al televisor, ella consigue mantener al espectador pegado al televisor ansioso por ver cual será su nueva invención. Ella consigue aquello soñado por todos los que trabajamos en el medio y es que no baje la curva cuando el presentador da paso a un vídeo.
 

Dicen que logramos la madurez cuando tenemos la autoestima bien alta, estamos seguros de nosotros mismos y hacemos lo que queremos hacer sin preocuparnos por el que dirán. Si esto es cierto, está claro que la Milá aparte de ser una de las mejores presentadores del país, ha adquirido una gran madurez profesional. ¿Qué más da que lleve braga o tanga? ¡Arriba la Milá!

 http://img01.lavanguardia.com/2013/05/24/Mercedes-Mila-ensena-las-braga_54374354538_53699622600_601_341.jpg

No hay comentarios:

Publicar un comentario